¿Deberíamos ceder a la tendencia de las gomitas?
Las gomitas, estos pequeños complementos alimenticios que parecen casi caramelos, están en auge. Y con razón: ya sean de origen vegetal o llenos de vitaminas y minerales, se presentan como productos saludables, positivos para la salud, pero también deliciosos para consumir. ¡Esa es la demanda del pueblo!
¿Deberíamos lanzarnos a ello con los ojos cerrados? Esto es lo que intentaremos ver en este artículo.
¿Qué son las gomitas?
Las gomitas son complementos alimenticios que se presentan en forma distinta a cápsulas, comprimidos o polvo. Ellos son pequeños suplementos gelificados que contiene principios activos con variados beneficios: sueño, belleza, digestión, energía, inmunidad…
Si las gomitas son tan populares es principalmente por su presentación: son muy parecidas a los dulces (especialmente los pequeños “ositos”), tienen nombres geniales y pegadizos, un color festivo que hace que lo desees y, sobre todo, el sabor que lo acompaña. Muchas estrellas, reality shows y otros, también lo promocionan en las redes sociales.
Con la ecuación “producto bueno para la salud + buen gusto + moda en las redes”, entendemos fácilmente que el resultado es una gran popularidad de estos nuevos suplementos que llegan desde Estados Unidos.
Los límites de las gomitas
Aunque tienen la ventaja de dar lugar a curas más completas, en Novoma hemos decidido no ceder a esta tendencia y hemos elegido deliberadamente el formato en cápsulas para nuestros complementos alimenticios.
De hecho, las gomitas tienen dos desventajas principales:
• Su eficacia suele ser menor que la de las cápsulas., porque contienen ingredientes activos en menores cantidades. Esto varía según la composición, pero para un determinado número de gomitas, las cantidades de ingredientes activos son mucho menores que su equivalente en una cápsula o tableta. Esto se debe, sobre todo, al resto de componentes necesarios para elaborar y dar consistencia a las gomitas: azúcar, colorantes, acidificantes, etc., que hacen que quede menos espacio para las vitaminas y nutrientes esenciales. ¡Es imposible contener 500 mg de vitamina C en 1 gomita, por ejemplo (mientras que es completamente posible en 1 cápsula)!
Por lo tanto, corre el riesgo de consumir gomitas que no satisfagan plenamente sus necesidades., o tener que consumir cantidades astronómicas para cubrir todas estas necesidades. ¡Y aquí es donde llegamos a nuestro segundo punto!
• La composición de las gomitas es una contradicción nutricional para nosotros. Además de contener diversos agentes gelificantes y acidificantes, suelen contener azúcar (jarabe de glucosa, stevia, etc.). ¡Por eso no es casualidad que sean apetitosos y realmente sepan bien! El problema es que el azúcar no es realmente una sustancia recomendable o de la que a menudo tenemos deficiencias; incluso sería exactamente lo contrario. El azúcar de las gomitas aporta calorías, por lo tanto, un posible aumento de peso y todos los riesgos asociados, pero también puede provocar adicción o ganas de consumir más de lo necesario.
Esto nos parece en total contradicción con el aspecto de salud y bienestar ¡Cuál debería ser la prioridad de cualquier complemento alimenticio!
Gomitas, una solución no tan milagrosa
En última instancia, las gomitas tienen un interés limitado para nosotros. Pueden resultar útiles para garantizar la finalización de un tratamiento prolongado, especialmente en niños que se muestran reacios a tragar las cápsulas o comprimidos tradicionales.
Pero debido a sus principios activos a veces infradosificados y a su contenido en azúcar y calorías, te recomendamos optar por otras formas de complementos alimenticios más saludables y eficaces.
