¿Cómo reconocer una piel seca? Comprenderla, prevenirla y cuidarla
Marie ARNOULT
8 min
Índice
Si bien la piel grasa suele mencionarse como el problema cutáneo más invasivo, tener la piel seca es igual de desagradable. Tirantez, descamación, reacciones cutáneas, enrojecimiento… ¡La piel seca afecta de media al 24 % de los franceses!
¿Tienes la sensación de pasarte el tiempo embadurnándote la cara de crema y que con una simple ducha ya te pica la piel? Este artículo es para ti.
Características, causas y soluciones: te damos consejos concretos para salvar las pieles secas. 🙌
Piel seca: ¿cuáles son sus características?
Lejos de ser una simple falta pasajera de hidratación, una piel seca refleja una carencia de lípidos esenciales (y no solo eso). Aquí te contamos cómo reconocerla y no confundirla con una piel grasa o mixta.
Falta constante de sebo
Se caracteriza por la ausencia de ese toque de brillo natural que la hace suave y luminosa: el sebo.
Una piel seca produce menos sebo, la película lipídica que asegura la protección natural y la hidratación de la piel. Sin esa grasa, la piel es más vulnerable a las irritaciones y a la deshidratación, volviéndose de facto más sensible a las agresiones externas (contaminación, cambios de temperatura, viento, etc.)
Textura áspera y aspecto apagado
La piel seca se manifiesta por su textura áspera y su tendencia a pelarse. A menudo carece de luminosidad, con un aspecto apagado e irregular, lejos del resplandor natural de una piel sana.
👉 Las zonas de descamación se sitúan sobre todo en las mejillas o alrededor de la nariz. Muy lejos del famoso “glow” que todos buscamos.
Molesta sensación de tirantez
La piel seca suele ir acompañada de una sensación de tirantez, sobre todo después de la ducha o en ambientes secos.
Esa impresión de piel “demasiado tirante”, incluso incómoda, se debe a la falta de flexibilidad y confort.
Predisposición a líneas finas y envejecimiento prematuro
A diferencia de una piel grasa, la piel seca es un terreno fértil para la aparición prematura de líneas finas.
👉 Sin un aporte suficiente de hidratación y nutrición, los signos de la edad aparecen antes. Quienes la padecen son más propensos a la aparición temprana de líneas finas y señales de envejecimiento. La falta de agua y de lípidos debilita la barrera cutánea, favoreciendo la aparición de líneas finas, especialmente alrededor de los ojos y la boca.
¿Cuáles son las causas de la piel seca?
Reducir el origen de la piel seca a una simple sequedad sería pasar por alto la pluralidad de factores implicados. Y aunque son muchos, aquí están los que más influyen en el estado de la piel. ☝️
El factor genético, el “regalo” de nuestros antepasados
Si has oído a tus padres quejarse de su piel seca, ¡es muy probable que hayas heredado ese “regalo”! El componente hereditario es común a muchos trastornos cutáneos: no te sorprendas si compartes el mismo tipo de piel con tu familia.
👉 En otras personas, la producción de sebo es naturalmente menor; su piel es más vulnerable a la sequedad y la deshidratación.
Causas internas y fluctuaciones hormonales
Las fluctuaciones hormonales (sobre todo durante la menopausia), el envejecimiento e incluso el estrés pueden afectar la capacidad de la piel para retener la hidratación.
Con la edad, la caída de los estrógenos en las mujeres provoca un enlentecimiento de la renovación celular y una disminución de la producción de sebo por las glándulas sebáceas. El estrés psicológico también puede alterar la barrera cutánea y causar irritaciones.
👉 Ciertas enfermedades como el hipotiroidismo favorecen este tipo de piel: la sequedad cutánea está relacionada con una disminución de la secreción de las glándulas sudoríparas (responsables de la transpiración). Los estudios muestran que las personas afectadas serían propensas a la deshidratación de la piel, además de cabello y uñas quebradizos.
La alimentación y las carencias vitamínicas
¡La piel siempre refleja nuestro plato! Si la alimentación carece de ácidos grasos esenciales, vitaminas A, C, E o zinc, se notará en la piel. Es momento de dar protagonismo al aguacate, los frutos secos y otras oleaginosas, los pescados azules como el salmón y las verduras de hoja verde.
El entorno y el clima, los enemigos invisibles de la piel
Los climas secos y fríos son los peores enemigos de las pieles secas: los contrastes de temperatura entre edificios sobrecalentados y calles heladas ponen la piel a prueba y tienden a agravar la sensibilidad de la barrera cutánea.
👉 En invierno: nuestros sistemas de calefacción suelen resecar el aire… y la piel de paso.
👉 En verano: los aires acondicionados, el sol y el agua salada de los baños en el mar acentúan la deshidratación cutánea.
Productos agresivos e inadecuados: los falsos aliados
Al igual que en las pieles grasas, usar productos agresivos e inadecuados vuelve las pieles secas… ¡aún más secas! Muchos tratamientos contienen ingredientes poco apropiados y agresivos para cualquier tipo de piel.
👉 Es el caso de los productos con alcohol y activos abrasivos, así como de los exfoliantes.
¿Cuáles son las molestias frecuentes de la piel seca?
Más allá de lo visible, tener la piel seca no es nada agradable y conlleva múltiples incomodidades en el día a día.
Mayor sensibilidad y piel “a la defensiva”
Cuando la barrera cutánea se reseca, se vuelve hiperreactiva. Las personas con piel seca suelen relatar sensaciones de quemazón, hormigueo y enrojecimiento, similares a una reacción alérgica o a un eccema de contacto.
Descamación de una piel desnutrida
La descamación, esas pequeñas pielecitas que se acumulan, es en realidad la pérdida de las capas superficiales de la epidermis. ¡Nada estético ni agradable!
➡️ Si la piel no recibe los aportes lipídicos y la hidratación necesarios, comienza un círculo vicioso y su estado sigue deteriorándose.
Tacto áspero y falta de confort
La textura áspera es habitual en quienes tienen piel seca. Donde debería ser suave y agradable, presenta una superficie irregular y rugosa al tacto, a veces visible incluso bajo el maquillaje o una base cubriente.
Picor e irritaciones frecuentes
La sensibilidad aumentada de una piel desnutrida envía un mensaje de alerta al cerebro: ¡ganas de rascarse!
👉 Cuanto más seca está la piel, más pica. Y al rascar, ¡empeoramos la situación! El picor cutáneo es frecuente en casos de eccema, psoriasis o xerosis (sequedad de la piel), pudiendo provocar lesiones cutáneas (hinchazón, escamas, costras, cicatrices…)
Nuestros consejos para manejar la piel seca y recuperar confort
Es hora de darte pistas y soluciones concretas para acabar con la piel seca, o al menos ayudarla a recuperar flexibilidad y brillo. 😌
Hidratar vs nutrir: cuidado con no confundir
Piel seca y piel deshidratada no son lo mismo. La piel deshidratada carece de agua, mientras que la seca carece de lípidos.
La piel necesita ser nutrida e hidratada, y primero ¡desde dentro! Aunque no podamos controlar el clima, sí podemos actuar con la alimentación y la higiene de vida. 😌
Nutrir la piel con productos adecuados: los mejores aliados de las pieles secas
En la estantería de cuidados, las pieles secas adoran la hidratación y la nutrición:
👉 Apuesta por aceites naturales y cremas ricas en ceramidas, mantecas vegetales y ácidos grasos esenciales, que ayudan a restaurar la barrera cutánea y reforzar la barrera lipídica.
👉 Elige aceite de argán, aceite de almendra dulce y sérums con ácido hialurónico para hidratar la superficie de la piel.
Trucos cotidianos para piel seca
✅ Evitar duchas demasiado calientes: el calor tiende a disolver la poca grasa presente en la piel y acentúa la sequedad cutánea. Prefiere una temperatura tibia (34–35 °C) y limita la duración (¡bonus ecológico!).
✅ Humidificar el ambiente: este consejo es aún más útil en invierno. Un humidificador ayuda a mantener una humedad óptima y beneficia a la piel.
✅Aplicar protección solar: la piel seca no está a salvo de los rayos UV. En verano e invierno, elige cuidados con protección solar adecuada.
La piel seca puede ser caprichosa, pero con los gestos adecuados y productos bien elegidos puede volverse más flexible y luminosa. ¿Nuestro último consejo? Constancia y suavidad: tu piel te lo agradecerá. 🙂
