¿Cómo recuperarse del desfase horario rápidamente?

Nuestro reloj biológico está sujeto al ritmo circadiano que regula los momentos de vigilia y sueño gracias al cortisol y la melatonina. Este ritmo depende del cambio día-noche y de nuestro entorno. Cuando viajamos, ya no está sincronizado con la hora local.

El jet lag corresponde entonces a la desincronización de nuestro reloj biológico ⏰.

Las repercusiones del jet-lag en el organismo dependen del número de husos horarios cruzados. Se considera que los efectos del jet-lag se sienten más a partir de un desplazamiento sobre 3 husos horarios.

¿Sabías que un desplazamiento hacia el Este genera más desajustes en el organismo? El jet lag es más perturbador porque al ir hacia el Este acortamos nuestro día y nos cuesta dormir temprano. Por el contrario, un viaje hacia el Oeste añade horas al día y tiene menos efectos en el ritmo circadiano.

Los efectos más frecuentes del jet lag son:

1. un sueño perturbado con despertares espontáneos durante la noche;

2. fatiga y ganas de dormir durante el día;

3. irritabilidad y variación del humor;

4. una disminución del rendimiento;

5. una baja en la concentración.

¿Te sientes desfasado y tu cuerpo tiene dificultades para adaptarse debido a los efectos del jet lag? ¡Nada más normal!

Un vuelo de larga distancia provoca una desincronización del ritmo interno y externo. Los horarios de las comidas están desplazados, te falta sueño y tu organismo está desorientado!

Con la cabeza en los preparativos y las maletas, adopta un buen estilo de vida para evitar el jet-lag!

Una de las claves para recuperarse del jet lag es ajustar tus hábitos antes de la partida. Si vas hacia el Este, puedes comenzar a adaptar tu horario de acostarse progresivamente. Al ajustar así tu reloj biológico, preparas tu cuerpo para el nuevo huso horario y evitas una fatiga demasiado intensa.

¡Volvamos a poner los relojes en hora! Además de ajustar los horarios de sueño, también puedes adaptar ligeramente y progresivamente los de tus comidas un poco antes de la partida. Más aún, si se trata de una larga estancia.

Pequeño consejo: se evitan las comidas demasiado abundantes y los alimentos grasos antes del vuelo para descartar las molestias digestivas!

¿Y qué hacer durante el vuelo y a la llegada? Descubre ahora algunos trucos para recuperarse bien del jet lag.

Si no lo has hecho antes, piensa en ajustar la hora de tu reloj al subir al avión o tan pronto como aterrices. Intenta adaptar tus actividades a la hora local a tu llegada.

¿Es de noche? Ve a la cama o sumérgete al menos en la oscuridad para descansar. Si llegas en pleno día, trata de permanecer activo al aire libre incluso si sientes fatiga. No cometas el error de dormir al llegar si es de día. Podrías retrasar aún más la adaptación al nuevo ritmo.

Una vez en el lugar, aprovecha la luz del día (protegiéndote, por supuesto si hace falta del sol y del calor). La luz natural permite de hecho que el organismo se sincronice con la hora del día. Ayuda al reloj biológico a regularse.

El ejercicio físico es de hecho parte de los secretos para recuperarse del jet lag. Tranquilízate, no necesitas hacer un maratón o escalar el Everest! Basta con practicar una actividad física que te dará energía. Recorre las calles descubriendo los barrios típicos de la ciudad, camina a lo largo de las costas o nada en el mar. ¿Y por qué no montar en bicicleta para descubrir tu lugar de vacaciones? Muévete a tu ritmo teniendo en cuenta la fatiga relacionada con el viaje.

Una vez en el lugar, las especialidades locales seguramente te llamarán la atención! Disfruta mientras te aseguras de no comer alimentos demasiado grasos. Prefiere las comidas ricas en proteínas durante el día y en carbohidratos por la noche, ya que favorecen el sueño. Puedes comer por ejemplo un plátano, nueces o beber leche y alimentos ricos en triptófanos. En cuanto a las bebidas, evita la cafeína y recuerda hidratarte bien.

Las propiedades relajantes del ashwagandha (ginseng indio) son reconocidas. Una suplementación con Ashwagandha Orgánico puede ayudarte a superar las dificultades para dormir relacionadas con el jet lag.

Nuestra Fórmula Sueño a base de extractos de plantas es perfecta para recuperarse del jet lag. Los trotamundos la adoran! Ideal para favorecer el inicio del sueño, te ayudará a tener un sueño más profundo y reparador.

Viajar sin sufrir el jet lag, ¿es mejor no? ¡Gracias a todos estos consejos, recuperarse del jet lag rápidamente se convierte en un juego de niños! ¡A disfrutar de las vacaciones en el otro lado del mundo!